Sobre llovido mojado, dicen las alcaldías. Y es que la Federación de Asociaciones Municipales (FAM), considera que el Gobierno central los ha desamparado al transferirles obligaciones para la cuarentena dinámica que empieza este lunes, sin haber solucionado todavía la necesidad de recursos económicos y de equipos para luchar contra el coronavirus. El Gobierno transitorio levantó las manos en el momento más complicado y dejó la responsabilidad a los municipios y las gobernaciones sin recursos económicos. Solo cinco de los nueve departamentos tienen laboratorios y casi todos sin reactivos para pruebas de Covid-19. Nos mandaron a la guerra sin municiones”, afirmó en su twit, el presidente de la FAM, Álvaro Ruiz. No hemos podido resolver ni el primer problema y ahora nos dejan a nuestra suerte. Más aún cuando los municipios han disminuido sus ingresos sustantivamente», afirmó Ruiz.
Mientras algunas regiones entran a una cuarentena dinámica, la capital beniana, Trinidad, se encapsula y se aísla del resto del país para frenar el avance del coronavirus. La acción se toma en un departamento que tiene una infraestructura hospitalaria deficiente, poco personal médico y una población asustada ante el avance de los contagios y las muertes. Es triste ver que no atiendan al señor. Nosotros hacemos todo lo posible para llegar con el paciente, pero ni siquiera lo atienden, nos dicen: ‘llévenselo, no podemos atenderlo’”, relata llorando. Tan grave es la situación que algunos médicos tienen que elegir a qué pacientes salvar y a quiénes no. Para los fallecidos víctimas del Covid-19, en Trinidad se ha improvisado un cementerio en las afueras de la ciudad.
Este domingo 31 de mayo, cuando termina el quinto mes del año, también, la emergencia sanitaria y se da paso a la cuarentena dinámica y condicionada , Bolivia contabilizó 9.982 contagios de coronavirus. En la presente jornada hubo 390 nuevos infectados en siete departamentos del país, según el informe epidemiológico del Ministerio de Salud. Los nuevos infectados fueron registrados en Santa Cruz (169), Beni (102), Cochabamba (55), La Paz (29), Oruro (14), Potosí (20) y Chuquisaca (1), según la información. Con estos casos, los departamentos de La Paz, Cochabamba y Oruro, van aumentando sus cifras con contagios cada vez mayores. El reporte detalla que se contabilizaron solo tres decesos este domingo, en Beni. En todo el país, el número total de víctimas mortales de la pandemia, desde el primer deceso, es de 313.
El Senado aprobó el viernes, la “Ley extraordinaria para la transferencia de competencias operativas del subsector privado de salud, al Ministerio de Salud, durante la emergencia sanitaria producida por el coronavirus”. La normativa pasará a ser revisada por la Cámara Baja, para su posterior promulgación.El proyectista de la ley, Omar Aguilar, explicó que, con esta ley, “el Ministerio de Salud correrá con los gastos por las atenciones de pacientes con Covid-19 a los propietarios de los hospitales privados. Es para evitar el colapso del sistema público de salud, mientras dure la pandemia”, señaló el senador y puso como ejemplo que, la normativa ya podría empezar a ser aplicada en las ciudades de Santa Cruz y Beni, donde existen cientos de casos de coronavirus.
Tras más de seis horas en cuarto intermedio por falta de acuerdos políticos, en una sesión accidentada de la Asamblea Legislativa Departamental de Oruro eligieron a Edson Oczachoque Gerónimo (MAS) como el nuevo gobernador del departamento, con 19 votos a favor, tres en contra, uno nulo y nueve abstenciones de los asambleístas del MAS. Oczachoque era presidente de la Asamblea Legislativa hasta minutos antes de la reanudación del cuarto intermedio, cuando presentó su carta de renuncia al cargo. La bancada del MAS había planteado la ratificación de Zenón Pizarro como gobernador, los disidentes de ese partido postularon a Oczachoque y los asambleístas de Demócratas a Saúl Sánchez.
Desde que comenzó la pandemia del coronavirus en Bolivia, nadie había podido conocer de cerca el trabajo que realiza el Centro Nacional de Enfermedades Tropicales (Cenetrop), encargado de procesar las muestras que, en principio, iban llegando a cuentagotas hasta allí. Hoy, la figura es diferente. María Isabel Méndez Melgar, directora general ejecutiva de este centro, catalogado como de nivel tres de bioseguridad y que ha venido trabajando sin tregua para conocer cuántos son los afectados por este virus que ya lleva más de 6.000 casos positivos en el país y más de 250 fallecidos. Las jornadas de trabajo son duras. En turnos de 24 horas, los laboratoristas intentan tener los resultados de lo que ahora se ve como una avalancha de contagios, ya que este centro no solo procesa las muestras de Santa Cruz.